En el Día internacional de los Bomberos, la FSESP quiere manifiestar su solidaridad con los bomberos fallecidos, quienes murieron mientras estaban prestando servicio a nuestras comunidades y quienes dedicaron sus vidas a proteger la seguridad de todos; a sus familias, colegas y compañeros. Rendimos homenaje a quienes nunca se les olvidará por su coraje y compromiso.
Desde el comienzo de la pandemia, los bomberos y los servicios de emergencia han estado bajo una gran presión. Junto a los trabajadores en la línea de frente, arriesgan sus vidas para proteger a los demás. El Comité Ejecutivo de la FSESP manifiesta su gratitud a todos los bomberos de Europa y confirma su compromiso a continuar su lucha junto a los bomberos para lograr mejorar la legislación relativa a la protección de los trabajadores del asbesto y otras sustancias carcinógenas y mutágenas.
Hay que recordar también que los bomberos son seres humanos, no superhéroes. Son trabajadores normales que se enfrentan a situaciones traumáticas cada día. Los riesgos psicosociales y el estrés postraumático son situaciones ampliamente documentadas a las que hacen frente los bomberos. Se necesitan medidas de prevención y específicas en todas las fases de su desempeño laboral.
Por último, el Comité Ejecutivo de la FSESP expresa su solidaridad con los bomberos de Ucrania: mujeres y hombres que trabajan sin descanso para responder a las necesidades de su comunidad en el conflicto actual y en las circunstancias más desafiantes, ya que están rodeados y proyectiles y bombas.
Les deseamos a todos los bomberos un buen Día internacional de los Bomberos.
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